Grupo Elektra, propiedad del empresario Ricardo Salinas Pliego, recibió un nuevo revés legal tras la resolución unánime del Segundo Tribunal Colegiado en Materia Administrativa del Primer Circuito, que ordenó el pago de un adeudo fiscal cercano a 2 mil millones de pesos por concepto del Impuesto Sobre la Renta (ISR) correspondiente al ejercicio fiscal 2010.
Esta decisión reafirma la validez del crédito fiscal y exige su liquidación inmediata, desechando los recursos presentados por la empresa que intentaban suspender la resolución bajo alegatos de imparcialidad, considerados por el tribunal como tácticas dilatorias recurrentes de Elektra.
Segundo fallo judicial por adeudo fiscal contra Grupo Elektra
Este fallo se suma a otro emitido el 19 de junio por el Décimo Tribunal Colegiado en Materia Administrativa, que ordenó el pago de un adeudo similar por aproximadamente 2 mil millones de pesos, derivado del ejercicio fiscal 2012. En conjunto, ambos fallos suman cerca de 4 mil millones de pesos en obligaciones fiscales pendientes para Grupo Elektra.
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Litigios fiscales prolongados con el SAT
La disputa entre Grupo Elektra y el Servicio de Administración Tributaria (SAT) no es reciente. Desde hace más de una década, la empresa ha enfrentado múltiples litigios por conceptos relacionados con el ISR, deducciones no autorizadas y otras irregularidades contables, generando una cascada de juicios ante tribunales federales.
¿Qué sigue para Grupo Elektra y Ricardo Salinas Pliego?
Aunque la resolución del Segundo Tribunal Colegiado es definitiva en segunda instancia, Grupo Elektra aún puede solicitar un recurso de revisión ante la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN). La admisión de este recurso depende del máximo tribunal, que renovará su integración el 1 de septiembre, lo que podría modificar el escenario jurídico y político para la apelación.
Impacto y contexto de la disputa fiscal
Estos fallos no solo tienen implicaciones legales, sino que también reflejan el compromiso del Estado mexicano con la recaudación fiscal efectiva y la equidad tributaria, colocando a Salinas Pliego en el centro del debate público como símbolo de resistencia empresarial frente a las obligaciones fiscales. Mientras tanto, el SAT y el Poder Judicial continúan litigios similares con otras grandes corporaciones para combatir la evasión fiscal y fortalecer las finanzas públicas del país.
Este caso podría sentar un precedente relevante para otras empresas con adeudos fiscales pendientes, consolidando una narrativa de mayor rigor en la fiscalización de grandes contribuyentes en México. El desenlace de esta disputa legal influirá no solo en Grupo Elektra y Ricardo Salinas Pliego, sino también en el clima de cumplimiento fiscal en el país.
