El estreno de la esperada película Superman, dirigida por James Gunn, no solo dominó la taquilla, sino que también generó un inesperado y poderoso impacto social: un aumento histórico en la adopción de perros en todo Estados Unidos, fenómeno bautizado como el “Efecto Krypto”, en honor al emblemático perro del superhéroe.
De acuerdo con un reporte de la app especializada Woofz, las búsquedas en Google relacionadas con la adopción de mascotas se dispararon 513% durante el fin de semana del estreno (del 11 al 13 de julio). Términos como “adoptar un perro cerca de mí”, “adopción de perros rescatados” y “adoptar un schnauzer” se posicionaron entre los más buscados.
Krypto, el superperro que conquistó corazones
En la cinta, Krypto es mucho más que una mascota: es el compañero leal y valiente del nuevo Superman. Su aparición emocionó tanto a las audiencias que inspiró a miles de personas a considerar la adopción responsable de perros.
James Gunn reveló en entrevistas que Ozu, el perro que sirvió de modelo para Krypto, fue rescatado y entrenado especialmente para el filme, incluso fue escaneado en 3D para llevarlo con precisión a la pantalla grande.
“Era un perro con muchos problemas de conducta, pero extremadamente fiel. Quería que Krypto tuviera esa misma fuerza emocional”, dijo el director.
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Datos clave del impacto en adopciones
Según el informe de Woofz, el estreno del filme generó estos aumentos de búsqueda:
- “Adoptar un schnauzer”: +299%
- “Adopción de perros rescatados”: +163%
- “Adoptar un cachorro”: +31%
Además, previo al estreno, Warner Bros. y la organización Best Friends Animal Society lanzaron una campaña nacional del 1 al 10 de julio, en la que promovieron adopciones gratuitas en refugios con sobrepoblación. Resultado: 454 perros encontraron un nuevo hogar.
Películas que inspiran acción
Este fenómeno demuestra cómo el cine, cuando conecta emocionalmente, puede trascender su función de entretenimiento. El “Efecto Krypto” no solo llenó salas de cine, también vació perreras y refugios.
Con cada nueva historia que se cuenta, el cine tiene el poder de generar cambios reales. En este caso, un perro ficticio ayudó a salvar cientos de vidas reales.
