En un esfuerzo por conservar el jaguar en Hidalgo, el Congreso del Estado recibió una iniciativa para declarar el 7 de septiembre como Día del Jaguar en Hidalgo. Esta propuesta busca visibilizar la situación crítica del jaguar, una de las especies más emblemáticas y amenazadas del continente americano, y fomentar acciones concretas para la protección de su hábitat natural.
El diputado Avelino Tovar Iglesias, del Partido Verde Ecologista de México (PVEM), presentó la propuesta, respaldada por Ericka Ortigoza Vázquez, directora de la Comisión Estatal de Biodiversidad de Hidalgo (COESBIOH). Ambos destacaron la importancia de generar conciencia sobre el jaguar, catalogado como especie en peligro de extinción según la Norma Oficial Mexicana NOM-059-SEMARNAT.
Pacus, el jaguar símbolo de la conservación en Hidalgo
La fecha del 7 de septiembre conmemora la muerte de Pacus, un jaguar encontrado gravemente herido en un basurero de Pacula en septiembre de 2024. Pacus sufrió heridas por arma de fuego y fue atendido en una fundación especializada, pero falleció seis días después. Su caso representa los retos de la conservación del jaguar y la lucha contra la caza furtiva en la región.
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Situación actual del jaguar en Hidalgo
Actualmente, solo hay tres jaguares registrados oficialmente en Hidalgo, bajo monitoreo constante de autoridades ambientales y brigadas comunitarias. Aunque se sospecha que existen más ejemplares en zonas remotas, la falta de registros oficiales evidencia la urgencia de proteger esta especie clave para el equilibrio ecológico de los bosques y selvas hidalguenses.
Objetivos del Día del Jaguar en Hidalgo
La declaración del Día del Jaguar tendría un enfoque educativo, cultural y ambiental para:
- Realizar campañas de sensibilización sobre la conservación del jaguar.
- Promover charlas y actividades en escuelas.
- Organizar jornadas de reforestación y eventos comunitarios.
- Reforzar la legislación contra la caza furtiva y el tráfico ilegal de fauna silvestre.
- Proteger el hábitat natural del jaguar en Hidalgo.
Ericka Ortigoza señaló que “recordar a Pacus es honrar un símbolo que representa una problemática profunda que afecta el patrimonio natural de Hidalgo”.
El jaguar es un depredador tope esencial para mantener el equilibrio ecológico, controlando poblaciones de especies herbívoras y preservando la salud de los ecosistemas. Su pérdida tendría un impacto negativo en la biodiversidad y la estabilidad ambiental de la región.
