Un total de 35 empresas de Hidalgo firmaron el Acuerdo Nacional del Maíz Blanco–Tortilla, en busca de estabilizar el precio de la tortilla en la entidad. A través de este acuerdo que signaron algunos de los municipios con mayor densidad poblacional, se busca que el precio por kilo se mantenga en 23 pesos.
El objetivo de esta medida es ponerle un freno a nuevos incrementos y dar certidumbre a uno de los alimentos básicos de la población. Esto luego que forma parte de la dieta de millones de ciudadanos, además que es un símbolo nacional.
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Empresarios combaten el alza al precio de las tortillas en Hidalgo
Municipios como Pachuca, Mineral de la Reforma, Tizayuca e Ixmiquilpan se encuentran entre los primeros en sumarse a esta estrategia impulsada a nivel federal. Esto luego del aumento que se registra desde los últimos cinco años, considerado un valor excepcional.
El precio de la tortilla aumentó de manera sostenida. Pasó de entre 13 y 14 pesos por kilo en 2020 hasta los 23 pesos en la actualidad. Es decir, en apenas un lustro se tuvo un incremento cercano al 90 por ciento, una problemática para las familias mexicanas.
Autoridades estatales señalaron que este aumento responde principalmente al encarecimiento de insumos como el gas LP, la energía eléctrica y los costos de transporte. Señalaron que estos factores ejercen presión de forma directa a la industria tortillera.
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¿Qué dicen las autoridades?
José Patricio Tun Ku es el jefe del programa de Desarrollo Rural de la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (Sader) en Hidalgo. Explicó que en la entidad hay cerca de 12 mil establecimientos formales que se dedican a la producción y venta de tortilla. Estos establecimientos están distribuidos en los 84 municipios.
El reto, indicó, es lograr que la mayoría se adhiera al acuerdo, ya que actualmente cerca de la mitad de los negocios opera en la informalidad. Indicó que esto dificulta la aplicación de medidas para mantener precios estables.
Tun Ku subrayó que la estabilidad del precio es clave para la economía familiar, ya que una familia promedio consume entre cinco o más kilos de tortilla a la semana. Por ello, evitar aumentos desproporcionados tiene un impacto directo en el gasto cotidiano de los hogares. Hasta ahora, los establecimientos adheridos se localizan en municipios como Pachuca, Mineral de la Reforma, Huichapan, Zempoala, Tizayuca, Atotonilco el Grande, San Agustín Tlaxiaca y Nopala, aunque la invitación permanece abierta para todos los negocios formalizados.
El Acuerdo Nacional del Maíz Blanco–Tortilla contempla 13 acciones coordinadas entre distintas dependencias federales. Entre los beneficios destacan el acceso a maíz blanco a un precio preferencial de 6 mil pesos por tonelada y la posibilidad de incorporar personal del programa Jóvenes Construyendo el Futuro, lo que permite reducir costos operativos.
Más allá de su impacto económico, la tortilla ocupa un lugar central en la dieta y la cultura de los mexicanos. Elaborada a partir del maíz, base de la alimentación desde tiempos prehispánicos, es una fuente importante de energía, calcio y otros nutrientes esenciales. Presente en prácticamente todas las comidas, la tortilla no solo acompaña platillos tradicionales, sino que también funciona como alimento principal para millones de personas. Por ello, mantener su precio accesible no solo es una medida económica, sino una acción clave para garantizar la seguridad alimentaria y preservar un elemento fundamental de la identidad nacional.
