El príncipe Harry y el rey Carlos III compartieron este miércoles una reunión privada en Londres, la primera desde febrero de 2024. El encuentro tuvo lugar en Clarence House y duró menos de una hora. Se produce en medio de la revelación de la enfermedad del monarca y después de años de tensiones familiares que comenzaron en 2020, cuando Harry y Meghan Markle dejaron sus deberes como miembros activos de la familia real para mudarse a Estados Unidos.
Un té privado y una agenda paralela
Padre e hijo se reunieron poco después de que el rey llegara a su residencia oficial. Tras un breve té, Harry se retiró y el soberano partió a Escocia, mientras el duque de Sussex continuó su agenda benéfica.
Durante su visita al Reino Unido, Harry ha asistido a la gala de WellChild, depositó una ofrenda en la tumba de la reina Isabel II y participó en actividades de apoyo a organizaciones como Children in Need. También visitó un centro de investigación del Imperial College y un estudio juvenil en Nottingham.
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Señales de acercamiento en medio de tensiones
El distanciamiento entre Harry y la familia real se ha visto marcado por declaraciones públicas, su libro En la sombra y su disputa sobre la seguridad en Reino Unido. Meghan Markle no ha vuelto al país desde 2022 y sus hijos Archie y Lilibet estuvieron presentes por última vez durante el 70º aniversario del reinado de Isabel II.
En mayo, Harry declaró a la BBC que desea recuperar la relación con su familia y expresó inquietud por la salud de su padre. Aunque breve, este encuentro privado puede representar el inicio de un acercamiento, aunque todavía quedan interrogantes sobre el futuro de los lazos familiares.
