Erik y Lyle Menéndez recibieron otra negativa de libertad condicional. A pesar de ello, sus familiares destacan la integridad y la conducta de los hermanos, quienes continúan participando en actividades de rehabilitación dentro de la prisión.

Optimismo y perseverancia familiar
El comunicado indica que los hermanos enfrentaron la audiencia con transparencia y responsabilidad. También resaltaron que siguen activos en programas de liderazgo y apoyo a otros internos, demostrando que su tiempo en prisión ha estado marcado por la rehabilitación.
“Este no es el final del camino. Ambos volverán a presentarse ante la Junta, y su petición de hábeas corpus sigue en revisión”, indicaron.
Hermanos Menéndez: Un crimen que sacudió al país
El asesinato de José y Kitty Menéndez, en agosto de 1989, conmocionó a Beverly Hills y al mundo del espectáculo. Erik y Lyle, de 18 y 21 años, cometieron el crimen en su lujosa residencia.
El juicio fue mediático y culminó en cadena perpetua sin libertad condicional. Décadas después, el resentenciamiento de 2024 les permitió solicitar libertad condicional bajo la ley de delincuentes juveniles.
La familia enfatizó que continuará apoyando a los hermanos y confía en los recursos legales disponibles.
“Sabemos que ambos son buenos hombres y seguiremos adelante”, concluyeron, manteniendo la esperanza pese a la negativa de la Junta.
