Ovidio Guzmán fue retirado de la prisión en Chicago, Illinois, como parte de un proceso de colaboración con autoridades de Estados Unidos. La medida se da días después de que el acusado se declarara culpable de delitos relacionados con narcotráfico y crimen organizado.
La información disponible indica que “El Ratón” continuará colaborando como testigo protegido. Su ubicación actual será mantenida en reserva por razones de seguridad.
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Se prevé que proporcione datos relevantes sobre la estructura del Cártel de Sinaloa, en particular sobre la facción conocida como “Los Chapitos”. También se esperan revelaciones sobre posibles vínculos con empresarios y figuras políticas.
El nombre de Ovidio Guzmán ya no figura en el registro del Buró Federal de Prisiones, lo que confirma que no permanece bajo custodia en un centro penitenciario.
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Esto no implica su libertad definitiva, ya que su sentencia final será determinada en un plazo de aproximadamente seis meses, una vez que se evalúe su nivel de cooperación.
De acuerdo con fuentes judiciales, como parte del acuerdo con la fiscalía estadounidense, Guzmán podría recibir una pena menor a la cadena perpetua. Además, se contempla el pago de una multa de 80 millones de dólares como parte de las sanciones.
El viernes pasado, Ovidio Guzmán López se declaró culpable de cuatro cargos en una audiencia federal. Su abogado, Jeffrey Lichtman, informó que el acuerdo alcanzado representa un avance importante para su cliente y que continuará colaborando con el Departamento de Justicia de EE. UU.
Hasta el momento, no se han revelado los términos completos del acuerdo entre “El Ratón” y el gobierno estadounidense. Se espera que en los próximos meses se dé mayor claridad sobre su situación legal y el alcance de su colaboración.
