La Cámara de Diputados recibió una propuesta para tipificar el delito de fraude por colisión vehicular, conocido comúnmente como “montachoques”, con penas de prisión que podrían alcanzar hasta los ocho años. Esta iniciativa fue presentada por el diputado Emilio Manzanilla, del Partido del Trabajo (PT), quien busca frenar una práctica delictiva que se ha incrementado en diversas zonas urbanas de México, especialmente en el Estado de México.
De ser aprobada, las sanciones contemplarían penas de entre cuatro y ocho años de prisión, así como multas que van de 500 a 1,000 Unidades de Medida y Actualización (UMA), lo que equivale a entre $56,570 y $113,140 pesos mexicanos.
Aumentarían penas si hay violencia o participación de funcionarios
La propuesta también contempla agravantes en caso de que el fraude se cometa con violencia física o moral, con la participación de dos o más personas, mediante el uso de documentos falsos, o si un servidor público está involucrado. En estos casos, la pena podría incrementarse hasta en un 50%.
La iniciativa del legislador petista no sólo se centra en las sanciones penales, sino también en estrategias de prevención y apoyo a víctimas. Por ello, plantea que la Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes (SICT), en coordinación con autoridades estatales y municipales, implementen campañas informativas sobre este tipo de fraudes y las formas de prevenirlos.
Asimismo, se sugiere establecer protocolos de atención para las víctimas, a fin de garantizar su seguridad y el acceso a mecanismos adecuados para presentar denuncias sin riesgo.
¿Qué son los “montachoques”?
El “montachoques” es una modalidad de fraude que consiste en provocar de forma intencional un accidente de tránsito, normalmente un choque leve, para luego culpar a la víctima y exigir dinero en efectivo, bajo amenazas o intimidación. Los responsables, que pueden operar en grupos organizados, buscan evitar la intervención de aseguradoras o autoridades, presionando para resolver el incidente “rápidamente” en el lugar.
Este delito ha proliferado especialmente en zonas metropolitanas y carreteras urbanas con alta circulación, lo que ha generado preocupación entre conductores y autoridades.
Recomendaciones para prevenir este delito
Las autoridades y expertos recomiendan a los conductores seguir una serie de medidas para evitar ser víctimas de este tipo de fraude:
-
No ceder ante presiones ni pagar dinero en el sitio del incidente.
-
Llamar al 911 y a la aseguradora de inmediato si hay agresividad.
-
Tomar fotos y videos del choque y de las personas involucradas.
-
No salir del vehículo si se percibe una amenaza; esperar a las autoridades.
-
Desconfiar de quienes propongan “arreglos rápidos” en efectivo.
En caso de que fueras víctima, es fundamental denunciar el hecho ante la fiscalía local o el Ministerio Público, proporcionando toda la evidencia disponible.
La propuesta de reforma la analizaran en comisiones antes de pasar al Pleno de la Cámara de Diputados. De aprobarse, significaría un avance importante en la protección de los automovilistas frente a estas prácticas extorsivas que ponen en riesgo tanto su seguridad física como su patrimonio.