El anticipado regreso de Conor McGregor al octágono de UFC podría estar en riesgo, ya que diversos rumores sugieren que su pelea programada para el 29 de junio contra Michael Chandler podría no llevarse a cabo. La incertidumbre ha aumentado entre los aficionados tras varios eventos recientes que ponen en duda la realización del combate.
Las especulaciones se intensificaron cuando McGregor canceló abruptamente la conferencia de UFC 303 en Dublín a inicios de esta semana. Esta cancelación inesperada ha generado inquietud entre los seguidores del peleador irlandés, quienes ahora dudan de la concreción del enfrentamiento contra Chandler.
Por su parte, Michael Chandler también ha mostrado comportamientos que podrían indicar la posible cancelación del combate. Se ha informado que Chandler podría abandonar su concentración en el gimnasio para viajar a Tennessee con su familia, lo que sugiere que el luchador estadounidense podría estar anticipando la suspensión del enfrentamiento.
Otro elemento que ha alimentado las dudas es una reciente publicación de McGregor en su cuenta de Instagram, donde se le ve en un hospital. Esta imagen ha generado especulaciones sobre una posible lesión que podría haber pospuesto su regreso al octágono. McGregor sufrió una grave lesión en julio de 2021 durante su trilogía contra Dustin Poirier, y su regreso a la UFC ha sido uno de los más esperados en el mundo de las artes marciales mixtas.
Hasta el momento, UFC no ha emitido ningún comunicado oficial sobre la situación del combate entre McGregor y Chandler. Sin embargo, la falta de confirmación por parte de la organización ha dejado a los fanáticos en vilo, esperando ansiosamente una actualización que clarifique la situación.
Este combate no solo representa el regreso de McGregor después de casi tres años fuera del octágono, sino que también es una prueba crucial para su carrera. Después de su derrota ante Poirier y la posterior lesión, McGregor ha estado trabajando en su recuperación y preparación para volver al máximo nivel de competencia.
Michael Chandler, conocido por su explosivo estilo de pelea, también se encuentra en un punto crucial de su carrera. Una victoria sobre McGregor podría catapultarlo a nuevas alturas dentro de la UFC, consolidando su posición como uno de los contendientes más peligrosos en la división de peso ligero.