El Gobierno Federal anunció la publicación de dos nuevas normas oficiales que fortalecerán la regulación del transporte y distribución de gas LP en México. Las disposiciones, que aparecerán en el Diario Oficial de la Federación (DOF), buscan garantizar mayor seguridad industrial, prevención de accidentes y control operativo en todo el país.
Durante la conferencia matutina de este 2 de octubre, la presidenta Claudia Sheinbaum detalló que las unidades de transporte deberán incorporar sistemas de localización GPS y reguladores de velocidad.
De igual manera, se establecerán verificaciones técnicas de forma periódica tanto en las pipas como en los centros de distribución. Esto con el objetivo de reducir riesgos como los observados en el puente de La Concordia en Iztapalapa, y asegurar la integridad de las operaciones de suministro.
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Nuevas normas: trazabilidad y seguridad
Sheinbaum resaltó que las nuevas normas integran “un esquema de trazabilidad del combustible”, buscando que cada fase del transporte cumpla con estándares de supervisión más rigurosos.
Según la secretaria de Energía, Luz Elena González, las disposiciones complementan la regulación vigente y abarcan dos ámbitos principales: transporte desde refinerías y distribución doméstica y comercial.
González enfatizó que la seguridad industrial será prioritaria, con pruebas de fugas y supervisión en plantas de almacenamiento, además de garantizar condiciones óptimas para los contenedores de gas.
Además se incluirá un programa de mantenimiento obligatorio para las unidades, pruebas periódicas de recipientes y elementos de seguridad, capacitación especializada para conductores y monitoreo constante de los vehículos.
El cumplimiento se establecerá en plazos diferenciados: unidades con más de diez años de antigüedad y capacidad superior a 5,000 litros deberán ajustarse en cuatro meses, mientras que el resto tendrá un margen de seis meses adicionales.
Con estas acciones, el Gobierno Federal pretende tratar la distribución de gas LP no solo como un tema de tránsito, sino como un asunto integral de seguridad industrial y operativa.
Estas medidas reflejan un esfuerzo por minimizar riesgos, proteger a la población y garantizar que el suministro de gas LP cumpla con los más altos estándares de seguridad. La administración reafirma su compromiso con la prevención de accidentes y la modernización de los sistemas de transporte y distribución del combustible.
