La justicia de Estados Unidos busca al exregidor de Xalapa y excandidato de Movimiento Ciudadano, Silem García Peña, acusado de participar en una red criminal ligada a La Luz del Mundo. La Corte del Distrito Sur de Nueva York lo responsabiliza de trata sexual, explotación infantil y conspiración de crimen organizado.
Vocero de la organización La Luz del Mundo
El expediente judicial describe a García Peña como un operador clave dentro de la iglesia. Desde su cargo como jefe de relaciones públicas habría funcionado como vocero y escudo de Naasón Joaquín, quien ya se encuentra preso en Estados Unidos. Testimonios y pruebas lo señalan por intimidar a víctimas, silenciar denuncias y moldear la narrativa pública a favor del líder religioso.
Tras la detención de Joaquín en 2019, García Peña y otros colaboradores habrían creado un plan de encubrimiento que incluyó la destrucción de documentos, amenazas a denunciantes y presión directa para que algunas víctimas se retractaran.

Red de complicidades
El caso de García Peña forma parte de una acusación más amplia contra la cúpula de La Luz del Mundo. La justicia estadounidense también tiene bajo custodia a Eva García de Joaquín, madre del líder, y a su sobrino Joram Núñez Joaquín, detenido en Chicago. Otras dos operadoras, Azalia Rangel García y Rosa Sosa, permanecen fugitivas.
Los fiscales sostienen que el grupo usaba la doctrina religiosa como instrumento de manipulación mientras desviaban recursos obtenidos de los feligreses para sostener la estructura criminal.
Caída en Michoacán
En paralelo a la búsqueda de García Peña, autoridades mexicanas realizaron un operativo en Vista Hermosa, Michoacán, donde arrestaron a 38 personas ligadas a la iglesia. En el campamento asegurado se localizaron armas, réplicas, radios de comunicación y equipo táctico.

Voces de las víctimas de La Luz del Mundo
Colectivos de sobrevivientes consideran que estas acciones representan un avance, aunque insuficiente.
“Durante años pedimos que se investigara a su madre y a su primo Joram. Hoy vemos que la justicia avanza, pero aún falta mucho”, señaló Sharim Guzmán, representante de denunciantes.
Las víctimas insisten en que el gobierno mexicano debe mostrar mayor determinación para impedir que la organización siga operando bajo esquemas de impunidad. Mientras tanto, García Peña continúa prófugo y su nombre figura en las circulares rojas de Interpol, lo que mantiene abierta la posibilidad de su captura y extradición en cualquier momento.