La Administración de Control de Drogas de Estados Unidos (DEA) aumentó a $25 millones la recompensa por información que conduzca a la captura del presidente venezolano Nicolás Maduro, acusado formalmente de liderar el Cártel de los Soles y conspiración para narcoterrorismo. Esta medida, anunciada el 2 de agosto de 2024, marca un endurecimiento de la política estadounidense bajo el gobierno de Trump, quien califica a Maduro como “narcodictador”. Los cargos incluyen tráfico de cocaína a EEUU y uso de armas de guerra para proteger operaciones narcóticas.
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Los cargos y estructura del Cártel de los Soles
La acusación federal detalla que Maduro y altos funcionarios:
- Corrompieron instituciones: Militar, judicial e inteligencia venezolana
- Operaron como cartel: Usando insignias militares (soles) como símbolo
- Aliados criminales: Apoyaron al Tren de Aragua y Cártel de Sinaloa
“Convirtieron al Estado venezolano en plataforma de narcotráfico global”, afirma el Departamento del Tesoro,
que designó al grupo como Terrorista Global Especialmente Designado. Documentos judiciales revelan que utilizaron rutas aéreas y marítimas controladas por la Fuerza Armada para exportar cocaína, aprovechando la inmunidad diplomática.
Contexto geopolítico y estrategia estadounidense
Esta oferta de recompensa complementa otras medidas contra Venezuela:
– Congelamiento de $10,000 millones en activos
– Prohibición de transacciones con PDVSA
– Presión a países que mantienen relaciones con Maduro
“Buscamos acelerar el fin de este régimen criminal”, declaró un portavoz del Departamento de Estado.
La estrategia contrasta con el enfoque de la administración Biden, que mantenía canales de diálogo discretos. Analistas sugieren que el aumento de la recompensa ($15 a $25 millones) refleja información nueva sobre presuntos vínculos con Hezbollah.