El presidente de Estados Unidos (EE.UU.), Donald Trump, anunció un ataque militar contra tres instalaciones nucleares clave en Irán. Esto desató una ola de condenas internacionales y tensiones diplomáticas.
A través de su cuenta en Truth Social, Trump declaró que el operativo fue ejecutado “con gran éxito”. Agregó que se lanzó “una carga completa de bombas” sobre el centro de Fordow, uno de los principales sitios de enriquecimiento de uranio del régimen iraní.
El impacto fue confirmado por medios estatales iraníes, que informaron sobre la activación de defensas aéreas en la ciudad de Qom y admitieron daños en el sitio nuclear de Fordow. Los tres blancos (Fordow, Natanz e Isfahan) son esenciales para el programa atómico de Irán. Su destrucción podría suponer un retraso de años en su capacidad para fabricar armas nucleares.
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Irán condena ataque de EE.UU. y Donald Trump contra instalaciones nucleares
Las reacciones desde Teherán no se hicieron esperar. El presidente iraní, Masoud Pezeshkian, acusó a Estados Unidos de estar “detrás” de los recientes ataques israelíes sobre su territorio.
Por su parte, el embajador iraní ante la ONU, Amir Saeid Iravani, denunció los ataques como “actos de agresión no provocados y premeditados” en una carta dirigida al Consejo de Seguridad de la ONU. El funcionario donde pidió una reunión de emergencia para este domingo a las 13:00 horas (hora de la CDMX).
El ministro de Asuntos Exteriores de Irán, Abbas Araghchi, calificó el bombardeo como una “grave violación” de la Carta de las Naciones Unidas y del derecho internacional. Responsabilizó directamente a la administración estadounidense por las consecuencias que podrían derivarse.
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También señaló que viajará a Moscú para reunirse con el presidente ruso Vladimir Putin, con el objetivo de reforzar alianzas regionales. Rusia, en reacción inmediata, condenó los ataques calificándolos de una “escalada peligrosa”.
La Unión Europea aboga por la calma y la diplomacia
Desde Europa, la respuesta fue cautelosa respecto al ataque de EE.UU. contra instalaciones nucleares en Irán. Diversos líderes europeos instaron a la calma, reiterando su compromiso con una salida diplomática. La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, advirtió que “Irán nunca debe adquirir la bomba”, pero subrayó que “la mesa de negociaciones es el único lugar para poner fin a esta crisis”.
Agregó que “con las tensiones en Oriente Medio alcanzando un nuevo punto álgido, la estabilidad debe ser la prioridad. Y el respeto al derecho internacional es fundamental”.
A pesar de los llamados al diálogo, Irán afirmó que las posibilidades de una solución diplomática “se han desvanecido” tras la ofensiva estadounidense. Araghchi también acusó a Trump de traicionar los canales diplomáticos, luego de que se habían sostenido conversaciones recientes sobre el programa nuclear iraní.
Uno de los escenarios más preocupantes es el posible cierre del Estrecho de Ormuz, ruta marítima clave por donde transita el 20% del petróleo global. Esta acción, de concretarse como respuesta iraní, podría desencadenar una crisis energética y económica de escala internacional.
