El Cardenal Kevin Farrell: el hombre que gobierna el Vaticano tras la muerte del Papa Francisco

Con la muerte del Papa Francisco, el cardenal irlandés-estadounidense Kevin Farrell se ha convertido en una de las figuras más importantes del Vaticano. Como camarlengo de la Cámara Apostólica, su rol es crucial: verificar la muerte del pontífice, organizar su funeral, sellar sus aposentos y administrar la Iglesia hasta que los cardenales elijan un nuevo Papa.

Farrell no es un desconocido en la Curia Romana. El Papa Francisco lo eligió personalmente para este cargo en 2019, y desde entonces ha acumulado responsabilidades clave: desde reformar las finanzas vaticanas hasta supervisar las Jornadas Mundiales de la Juventud. Su cercanía con Francisco lo convierte en un hombre de confianza en este período de transición.

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 Cardenal Kevin Farrell: un sacerdote con una trayectoria global

Nacido en Dublín en 1947, Farrell fue ordenado sacerdote en 1978 dentro de los Legionarios de Cristo, aunque luego se distanció de la congregación debido a los escándalos de su fundador, Marcial Maciel. Tras servir en México y Washington, donde fue obispo auxiliar, Francisco lo llamó a Roma en 2016 para liderar el Dicasterio para los Laicos, la Familia y la Vida.

Su gestión incluyó la organización de eventos masivos como el Encuentro Mundial de las Familias y la Jornada Mundial de la Juventud en Lisboa (2023). Además, el Papa lo puso al frente de reformas financieras críticas, incluyendo el fondo de pensiones del Vaticano, que estaba en crisis.

¿Qué hace exactamente el Camarlengo?

El papel de Farrell está definido por las normas del Universi Dominici Gregis y la constitución Praedicate Evangelium. Sus funciones incluyen:

  • Certificar la muerte del Papa y sellar sus habitaciones.
  • Organizar los funerales y notificar al mundo católico.
  • Administrar los bienes del Vaticano (incluyendo el Palacio Apostólico y Castel Gandolfo).
  • Preparar el cónclave donde se elegirá al próximo Papa.

Aunque Farrell es un administrador eficiente, su carrera no ha estado exenta de controversias:

  • Vivió con el cardenal McCarrick (expulsado por abusos) pero negó saber de sus crímenes.
  • Criticó a los sacerdotes por “no entender el matrimonio”, generando malestar.
  • Defendió Amoris Laetitia, el documento de Francisco sobre la familia que dividió a la Iglesia.

¿Qué esperar del Cardenal Farrell en el cónclave?

Como camarlengo, Farrell no intervendrá en la elección del nuevo Papa, pero su influencia es clave:

  • Garantizará la transparencia del proceso.
  • Mantendrá estable la economía vaticana durante la transición.
  • Protegerá la privacidad de los cardenales durante el cónclave.

El cardenal Kevin Farrell es hoy el hombre más poderoso del Vaticano, aunque su mandato terminará cuando un nuevo Papa sea elegido. Su trabajo asegurará que la Iglesia Católica navegue este período con orden y fe.

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