Un fuerte sismo de 5.2 con epicentro en Guerrero se sintió con intensidad en varias partes de la Ciudad de México, donde se registraron escenas de pánico y nerviosismo. Sin embargo, en algunas zonas la alerta sísmica no se activó, lo que generó preocupación entre la población. Autoridades ya investigan la razón de esta falla en el sistema de alerta temprana.

