Empresarios de Puebla denuncian una ola alarmante de extorsiones criminales y “cobro de piso” por parte de grupos delictivos. Revelaron que exigen cuotas regulares que van desde los 2 mil hasta los 40 mil pesos mensuales, bajo la amenaza de violencia si no pagan.
Esta práctica, que constituye un grave acto de delincuencia organizada, ha encendido las alarmas dentro del sector productivo, que opera entre miedo, incertidumbre y una sensación creciente de vulnerabilidad.
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Cuauhtémoc Rivera, presidente de la Alianza Nacional de Pequeños Comerciantes (ANPEC), señaló a El Sol de Puebla que comercios de todas las escalas, desde tienditas hasta bares concurridos, son asfixiados por la presión criminal.
Según Rivera, el reciente ataque al bar Lacoss no es un hecho aislado, sino la manifestación pública de un sistema de extorsión sistemática. La violencia, explica, se convierte en herramienta de control económico: “Conocen tu vida privada, a tu familia”, advirtió, exigiendo que se rompa este círculo de terror.
Felipe Mendoza Torres, líder de la Asociación Poblana de Restaurantes y Prestadores de Servicio, añadió que los químicos del crimen están presentes en el día a día del sector restaurantero, y pocos se atreven a alzar la voz por temor legítimo.
Esta autocensura agrava el problema, impidiendo que las víctimas denuncien y obligando a muchos empresarios a operar bajo un régimen de extorsión que erosiona su rentabilidad y les quita la libertad de crecer.
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Manuel Domínguez Gabián, presidente de la Asociación Poblana de Hoteles y Moteles, expresó que esta crisis de seguridad tiene un dañino efecto colateral sobre el turismo, un motor económico clave para la entidad.
La percepción de inseguridad disuade a los visitantes y a los inversionistas potenciales, poniendo en riesgo nuevos proyectos. “Sin seguridad no hay turismo, y sin desarrollo no hay crecimiento”, advirtió, mientras exigía una intervención urgente de los tres niveles de gobierno para desmantelar las redes de extorsión y restaurar condiciones mínimas de estabilidad para el sector formal.