En México, mujeres que amamantan enfrentan una nueva forma de acoso. Los llamados “Vampiros Blancos” son hombres adultos que buscan acercarse a madres lactantes en parques, salas de lactancia, centros comerciales o baños públicos. Su objetivo es tomar fotografías sin consentimiento o contactarlas con fines sexuales.
Lactofilia y riesgos de exposición
La lactofilia es la excitación sexual vinculada al pecho lactante y, en algunos casos, incluye el deseo de beber leche materna. Comunicación e Información de la Mujer (Cimac) reporta que una búsqueda del término en internet arroja más de 11 mil resultados, muchos relacionados con sitios de compra-venta de leche con fines sexuales o contenidos donde mujeres amamantan a hombres.
Esta práctica ha derivado en una forma de acoso digital y presencial, que vulnera la privacidad de las madres y expone su seguridad. Especialistas advierten que este fenómeno combina riesgos físicos y psicológicos, afectando la libertad de las mujeres en espacios donde deberían sentirse seguras.
Vampiros Blancos: Comercio de leche materna sin regulación
El mercado de leche materna no es ilegal, pero tampoco está regulado. Plataformas de compra-venta, como Marketplace, surgieron para apoyar a madres que no pueden amamantar, pero en años recientes se convirtieron en espacios donde hombres buscan adquirir leche con fines sexuales. Esto genera riesgos de seguridad y salud, además de vulnerar los derechos de las madres.
Durante la Conferencia Mundial por el 30 aniversario de la Coalición contra la Trata de Mujeres (CATW), especialistas alertaron sobre la mercantilización del cuerpo femenino y la falta de regulación que facilita estas prácticas de acoso.

Respuestas legales y recomendaciones
En Guanajuato, el Congreso local estudia sanciones para quienes tomen imágenes de mujeres lactantes sin consentimiento o las hostiguen en espacios públicos y virtuales. A nivel federal, todavía no existen leyes que tipifiquen este tipo de conductas.
Expertos en salud materno-infantil recomiendan que las madres donen el excedente de leche a bancos de leche y lactarios hospitalarios regulados por instituciones públicas. En México existen 37 Bancos de Leche Humana, y en Puebla hay dos bancos y 17 lactarios hospitalarios con atención neonatal. Estas medidas protegen la salud de los bebés y garantizan que las madres lactantes no enfrenten riesgos innecesarios.