Conor “The Notorious” McGregor, exestrella de la UFC conocido por su estilo agresivo y su personalidad provocadora, había sorprendido al anunciar su intención de competir por la presidencia de Irlanda. Tras retirarse de las artes marciales mixtas, el luchador buscaba trasladar su fama del octágono a la política.
Inicialmente, McGregor hizo un llamado a sus seguidores a presionar a las autoridades locales para respaldar su candidatura, un requisito indispensable. En un video frente al Parlamento en Dublín, afirmó que podía enfrentar los desafíos del país ante la inmigración masiva y prometió dar voz a los concejales locales, a quienes considera ignorados por el Poder Legislativo.
“Nuestros concejales son la columna vertebral de nuestras comunidades. Trabajan más duro y aportan más que los del Oireachtas, que fallan una y otra vez”, señaló el excampeón.
Obstáculos legales y requisitos políticos
Para postularse a la presidencia en Irlanda, un candidato debe ser mayor de 35 años y contar con el respaldo de 20 parlamentarios o 4 autoridades locales. El límite para registrar candidaturas era el 24 de septiembre de 2025. Hasta ahora, solo dos políticas cumplen con los requisitos: Catherine Connolly, diputada independiente, y Heather Humphreys, del partido Fine Gael.
En medio de estos requerimientos, McGregor anunció su retiro de la contienda, señalando que no renuncia por falta de apoyo popular, sino por las restricciones del sistema. Ningún parlamentario ni ayuntamiento estaba dispuesto a darle el aval necesario para aparecer en las urnas.
Controversias que marcaron su candidatura
El historial legal del excampeón generó críticas y complicó su postulación:
- En 2024, un tribunal de Dublín lo condenó por agredir a Nikita Hands, con una multa de 248 mil euros.
- En 2023, fue acusado de violar a una ejecutiva de Wall Street, aunque la Fiscalía de Florida no presentó cargos penales.
A pesar de estas controversias, McGregor insistía en que podía liderar Irlanda, argumentando que la llegada de migrantes ilegales amenaza la identidad del país. Su acercamiento con figuras como Donald Trump y Elon Musk durante el Día de San Patricio en la Casa Blanca reforzó la percepción de que busca un estilo de liderazgo similar al estadounidense.
Con esta decisión, Conor McGregor abandona su intento por la presidencia, cerrando un capítulo que mostró cómo un exdeportista mundialmente conocido puede intentar trasladar su fama mediática a la arena política, pero encontrándose con los límites del sistema electoral irlandés.
